Porta té con repujado en aluminio

En esta ocasión preparé un porta té el cual decoré con un diseño arabesco repujado en aluminio, el repujado es una labor que requiere de paciencia pero también es el que más le da importancia a una pieza.

En cada pieza de repujado, yo siempre elaboró mi diseño a medida, me parece más práctico hacerlo uno mismo que estar buscando el diseño que nos gusta y que sea del tamaño de la pieza.

Yo uso una forma fácil de hacerlo, pero antes de explicarles les daré la lista de materiales.

Materiales

• Lámina de aluminio
• Estilete o punzón de metal
• Esfuminos de MDF
• Pata de cabra y palito de naranjo
• Microporoso grueso
• Tijeras
• Pasta mural y espátula
• Pegamento de contacto

Puedes ver el video tutorial de este repujado en aluminio, ahí doy más tips y verás el paso a paso.

Si tienes alguna duda sobre las herramientas que he mencionado, como el estilete o punzón, te aconsejo que leas una entrada que escribí sobre las herramientas para repujar.

En el, doy una descripción de cada herramienta que uso y te diré que no son muchas, todo lo que has visto en mi blog que he repujado solo lo he hecho con esas.

Realizar el diseño para repujar

Para empezar, uno no necesita de ser experto en diseño para hacerlo, es más si es primera vez que uno se aventura en esto, es válido rediseñar uno ya hecho, en internet encuentras muchos.

Puedes imprimirte los diseños que te gusten y luego de eso tomar las medidas de la pieza en donde irá tu trabajo, en mi caso es un porta té no muy grande de 14cm por 8 cm. Y trazarlo en una hoja blanca, cualquier papel es válido.

Para hacer de tu diseño armonioso divídelo en cuatro zonas, en una cruz. Y en una de esta zona comenzarás a redibujar una parte del diseño que te guste, justo como el diseño que hice para este porta té.

Debo decir que los mejores resultados se da con diseños arabescos o en los que halla muchas curvas de diferentes tamaños.

Resuelto esto, lo calcamos al papel mantequilla, uno transparente y recién aquí es donde completaremos cada zona que quedo en blanco.

Por ser transparente, podemos doblarlo a la mitad y ver perfectamente el diseño que teníamos en el cuadrado del inicio.

Pasas el lápiz copiando el diseño en donde falta y con esto tenemos nuestro propio diseño adaptada justo al tamaño de la pieza que repujaremos.

Comenzar a calcar el diseño a la lámina

Ya con nuestro diseño listo, lo sujetamos a un pedazo de lámina de aluminio un poco más grande de la medida de la pieza, les aconsejo medio centímetro a cada lado, y con el punzón de metal calcamos el diseño.

Esto lo hacemos en una superficie dura como vidrio o en una mesa dura y completamente lisa.

Al finalizarlo, podemos alisarlo con un rodillo de teflón y si no, con el mismo esfumino que tenemos, sencillamente lo tomamos de forma horizontal y los arrastramos con una media presión.

Aplicamos el perfilado simple al diseño

El perfilado simple es el inicio del repujado, con esta técnica o paso se garantiza un repujado limpio.

Al hacerlo, perfilamos cada diseño uno por uno, esto es fundamental, sino llegaríamos a deformar el trabajo.

En el video puedes ver como lo aplico, primero delineo por el derecho de la lámina sobre el microporoso, doy vuelta y lo delineo con el punzón por dentro sobre el vidrio, nuevamente doy vuelta en el derecho y vuelvo a perfilar con el mismo punzón y la pata de cabra.

Así es el trabajo para cada parte del diseño.

A repujar el trabajo

Después de acabar con el paso anterior, es hora de repujar, para esto se usa el esfumino de trupan o MDF sobre el microporoso.

En este paso siempre hay que tener cuidado, porque a veces, al querer tener un repujado muy voluminoso se puede llegar a romper la lámina, haciendo que el trabajo se estropee por completo, en algunos casos.

Así que, yo siempre voy repujando de poco en poco para evitarme estos problemas.

Rellenar y pegar

Luego de finalizar el repujado, es momento de rellenarlo, yo utilizo varias opciones de rellenado, según sea el caso, en este yo use la pasta mural o enduido plástico, esto lo aplico con una espátula detrás del repujado y lo dejo secar.

Demora más o menos un día.

Lo siguiente es cortar el excedente de lámina con las tijeras, y después lo pegamos a la pieza usando el pegamento de contacto.

Y listo, tenemos ya finalizada el porta té.

Ahora bien yo, al porta té le decoré de una forma muy simple que me gusta mucho aplicar a las piezas, la técnica se llama bolseado y se realiza con dos colores de pinturas acrílicas, en este caso rojo y chocolate.

Para esto se pinta el color que quieras de fondo; seco se pasa el otro color e inmediatamente se coloca una bolsa arrugada, esto hará que se deje unas líneas interesantes en la pintura.

Una técnica muy practica.

¿Qué te ha parecido este proyecto?, a mi me encanta poder combinar dos técnicas en una sola, ¿ya has decorado algo con repujado?, si es así ¿cuál fue tu experiencia?

Te dejo la plantilla de repujado que use en este proyecto.

La próxima semana no subiré entrada por motivo de fiestas patrias en mi país, volveré la primera semana de agosto.

Gracias por tu tiempo.